Wiki La Wiki Pokéland
Advertisement
Logo Yume sono Henkō

Hallábase en aquel lugar, sin saber que fue un espejismo onírico...

Kathryn era una Munna que no pensaba como las demás, era callada y solitaria, no tenía muchas amigas, siempre se comportaba así. Todas las noches soñaba cosas maravillosas que creaba su imaginación: Viajaba por mundos de dulces, Paseaba alegremente por verdes y hermosas praderas, Flotaba entre las flores de un parque enorme en las nubes... ...Pero una noche especial, tuvo un sueño que cambiaría su vida...

Su madre, una Musharna le había contado que toda Munna tiene un día un sueño importante, que define el rumbo de su vida, Kathryn no lo creía, hasta esa noche. Hizo lo que siempre hacía antes de acostarse, se lavó los dientes, se bañó y se despidió de su madre. Hasta ahora era una noche normal. Entonces se acostó y durmió al poco rato, sabía que soñaría algo bueno, pero no sabía que tanto

Luego de unos momentos durmiendo el sueño comenzó, se hallaba en una verde pradera rodeada de blancas colinas, a lo lejos divisó un árbol gigantesco en el que se asomaban paredes entre las hojas. Entonces se acercó raudamente a la casa en el árbol y cuando la alcanzó entró sigilosa y ágilmente por una ventana, tratando de ver lo que había dentro, se veía vacía hasta que llegó a un salón lleno de Pokémon sentados alrededor de una mesa con ropas extravagantes que discutían, se acercó a ellos e intentó hablar, pero esos Pokémon la ignoraban, como si no existiera realmente, pero había un Pokémon, una Gothitelle, se hallaba en la punta de la mesa, tenía la cara como si estuviese enfadada, cuando los Pokémon comenzaron a pelear.

Se lanzaban las copas y comida, se levantaban de sus sillas y gritaban cosas a los demás, cuando aparentemente la Gothitelle reventó. Se sacó la enorme chaqueta que llevaba y se subió a la mesa, caminó unos cuantos pasos y se colgó del Candelabro, mientras ella se balanceaba los otros Pokémon seguían luchando como si no les importara lo que la Gothitelle hacía. Kathryn decidió salir de esa habitación y se dirigió a otra. Estaba vacía, salvo por un Pokémon que estaba encadenado a la pared, Era un Riolu. Kathryn se acercó a él y con un ataque destruyó las cadenas. Él mirándole a los ojos le dijo: “Mi nombre es Louis”. Su voz era grave y rasgada.

Kathryn pestañeó, y cuando abrió los ojos se encontraba corriendo por la pradera de un color cada vez más lúgubre todavía. Empezaba el atardecer y a su lado se encontraba Louis. Le dijo mientras corrían: “Estás atrapada aquí, y yo te ayudaré a escapar”. Kathryn no comprendía por qué quería ayudarla, ni nada de lo que intentaba decirle, pero dentro de ella al parecer sabía algo...

Finalmente llegaron a un altísimo bosque, Louis entró por un pequeño espacio y Kathryn le siguió. Louis encontró una roca algo más grande que Kathryn y la retiró, dejando ver un espacio por el que entró, Kathryn le siguió...

En un colosal cementerio olvidado y cubierto de la hiedra se encuentra una rosa capaz de devolver a un ser a su mundo natal…
Advertisement